Tenía un paquete de parpadelle en un armario hacía más de dos meses y no sabía cuando ni como darle salida, por que claro, como llevo esta dieta tan extraña y como pasta una vez al mes... pues no encontraba tampoco el momento de ponerme con ella.
Total, que decidí que al día siguiente iba a comer pasta !!! y punto, pero lo que no había pensado, era el acompañamiento, jejeje.
A mi me chifla la carbonara, pero claro, eran demasiados ingredientes calóricos así que mi mente empezó a maquinar.
La primera cosa que se me ocurrió fue cambiar la nata de vaca, por llamarla de alguna manera, por nata vegetal, total, en realidad es solo para dar untuosidad y para unificar ingredientes así que pensé que no cambiaría mucho el resultado final.
La siguiente cosa que se me ocurrió fue cambiar el bacón por champiñones, mucho más ligeros y saludables, sin lugar a dudas... así que cuando quise darme cuenta, había transformado la pasta " carbonara" ( entrecomillado por qeu a mi me gusta más con nata que con yemas de huevo) en pasta funghi un poco de aquella manera.
El resultado final, sin lugar a dudas, fue muy bueno; no las tenía todas conmigo por la sustitución de una nata por otra, pero a partir de ahora, cuando tenga que hacer una salsa con nata, utlizaré esta que no tiene grasas animales; aunque si las tiene hidrogenadas que son casi peores... así que uno ya no sabe ni que comer ni como hacer las cosas !!!
Como siempre, te recomiendo que hagas esta receta de pasta, si no tienes parppadelle, no pasa absolutamente nada, puedes sustituirla por otro tipo de pasta larga o penne.
Con pastas cortas no creo que quede muy bien por que el champiñón laminado es más grande que la pasta... entonces queda descompensado.
INGREDIENTES:
1 paquete de parppadelle ( o pasta larga)
1/2 cebolla
1 brick de nata para cocinar o nata vegetal
1 bandeja de champiñones
ELABORACION:
Lo primero es preparar la salsa.
Limpia los champiñones y quitales los tallos, cortalos a la mitad y cada mitad en láminas.
Pica la cebolla muy finita y ponla a pochar en 3 cucharadas de aceite, cuando esté pochadita, añade el champiñón y sofríe hasta que esté hecho.
Añade ahora la nata y espesa al fuego.
Mientras se espesa la salsa, pon la pasta a cocer en abundante agua salada, y cuando digo abundante, quiero decir 1 litro de agua y 10 grs de sal por cada 100 grs de pasta.
Una vez esté al dente, y con la salsa caliente, escurre la pasta, pásala a los platos y baña con la salsa " funghi".
Sirve muy caliente.
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